Kaja Nordengen, neuróloga especializada y autora deYour Superstar Brain (La superestrella de tu cerebro), nos explica cómo el cerebro controla las habilidades motoras finas y cómo puedes cambiar de mano para ejercitar el cerebro.
¿Qué lado del cerebro utilizas?
El cerebro se divide en dos hemisferios, el izquierdo y el derecho, cada uno de ellos encargado de sus propias tareas principales. El hemisferio derecho controla el lado izquierdo del cuerpo y viceversa. La mayoría de las personas tienen una mano dominante que usan, por ejemplo, para escribir. Suele ser la derecha. En todas estas personas, las manos tienen el mismo aspecto, con los mismos músculos y huesos. A pesar de ello, funcionan de manera distinta, simplemente porque el cerebro las controla de forma distinta. Cerca del 1 % de las personas puede utilizar y escribir igual de bien con ambas manos. A esto se le llama ambidiestrismo. Una cosa es nacer así (podría ser indicativo de la distribución de tareas entre los dos hemisferios del cerebro en general), pero otra muy distinta es ejercitar el cerebro para que lo aprenda.
Cambia de mano para ejercitar el cerebro
En el caso de las personas que realizan tareas que precisan unas habilidades motoras finas superiores tanto en la mano derecha como en la izquierda, como algunos músicos, podemos apreciar un crecimiento en el córtex cerebral que controla la mano no dominante. El haz de fibras nerviosas que conectan los dos hemisferios, llamado el cuerpo calloso (corpus callosum), también es físicamente más grueso. No todo el mundo tiene el tiempo o el deseo de tocar un instrumento musical, pero eso no quiere decir que no podamos ejercitar las habilidades motoras finas de nuestra mano no dominante.
Si empiezas a utilizar la mano no dominante (la izquierda en el caso de las personas diestras y la derecha en el de las zurdas) en las tareas cotidianas como afeitarte, maquillarte, cepillarte los dientes, manejar el ratón o el mando a distancia, realmente lo que estás ejercitando es el cerebro, no la mano. Aunque son pocas las personas que nacen con la capacidad de controlar las habilidades motoras finas de ambas manos, puedes ejercitar y aprender a usar las dos manos.
Algunas personas zurdas y, en especial, las personas zurdas mayores, se han visto forzadas, directa o indirectamente, a aprender habilidades motoras finas en la mano no dominante. En muchos idiomas, podemos ver qué mano era la que supuestamente se tenía que usar. En noruego, ser zurdo recibía el nombre de «mano incorrecta» y en inglés, diestro y correcto se expresan con una misma palabra («right»). El ambidiestrismo, la capacidad de utilizar ambas manos igual de bien, significa «ambas diestras». Antiguamente, a muchos niños zurdos en edad escolar les obligaban a escribir con la mano derecha y había muy pocas alternativas a las herramientas adaptadas para personas diestras. Hoy en día, la gente es mucho más abierta y tolerante con la zurdera, aunque todavía se pueden apreciar algunos vestigios de la antigua actitud.
Cerebros famosos con habilidades motoras superiores
Hay muchas grandes personas que han practicado ellas mismas para poder usar ambas manos: Tesla escribía con las dos manos. Leonardo da Vinci aprendió a pintar con ambas manos tras sufrir una lesión en el brazo derecho cuando era un niño. Pero no solo son los académicos o los artistas los que se benefician del uso de ambos hemisferios del cerebro para las habilidades motoras finas. Y no solo son las manos lo que cuenta. Ronaldo es un futbolista diestro de pie que ha aprendido a usar el pie izquierdo igual de bien.
Nos adentramos en una época en la que escribir a mano es una tarea cuya importancia se va desdibujando, por lo que la mano con la que escribimos también va perdiendo importancia. Sin embargo, son más las personas que quieren poder usar su mano dominante y la no dominante. Por ejemplo, al escribir en un teclado o realizar una operación quirúrgica, así como también en la música y en el deporte. Ver lo mucho que han podido practicar y avanzar da Vinci y Ronaldo es muy motivador e inspirador.
Así que, ¿por qué no ejercitas el cerebro y rompes tu costumbre de lavarte los dientes esta noche con la derecha?