La vitamina D: la vitamina del sol y de Möller’s
La vitamina D se suele relacionar con frecuencia con el aceite de hígado de bacalao (AHB), el pescado y el sol, pero ¿qué es exactamente y por qué es tan importante para el cuerpo? Además, ¿sabías que, técnicamente hablando, ni siquiera es una vitamina? Sigue leyendo porque aquí resolvemos todas tus dudas.
¿Qué es la vitamina D?
Es una vitamina liposoluble que contribuye a una serie de funciones importantes relacionadas con los minerales en el cuerpo. Entre esas funciones están el mantenimiento de unos niveles normales de calcio en sangre, su absorción y utilización normal. Gracias a estos efectos, juega un importante papel en distintas funciones del organismo, como, por ejemplo, a la hora de contribuir al mantenimiento de los huesos y los músculos en condiciones normales. Además de asegurar el funcionamiento normal del sistema inmunitario en toda la población. Descubre aquí los síntomas del déficit de vitamina D.
La vitamina D en el AHB
El aceite de hígado de bacalao (AHB) ha sido una fuente natural importante de vitamina D durante cientos de años, y alcanzó popularidad en Noruega cuando Peter Möller revolucionó su producción en 1854. El aceite de hígado de bacalao Möller’s se extrae del hígado del bacalao del Ártico nororiental, que migra a la costa noruega cada año. Este aceite es naturalmente rico no solo en vitamina D, sino también en vitaminas A y en ácidos grasos Omega-3 EPA (ácido eicosapentaenoico) y DHA (ácido docosahexaenoico).
Una cucharada de postre de 5 ml de AHB Möller’s contiene 10 microgramos de vitamina D, lo cual corresponde al doble del valor diario de referencia en general de la población. Para adolescentes de más de 18 años y adultos, el valor diario de referencia es de 5 microgramos.
¿En qué alimentos la encontramos?
La vitamina D existe en distintas formas, siendo las más habituales la D2 y la D3.
Vitamina D2
Tiene su origen en fuentes de origen no animales, como las plantas, las levaduras y los hongos.
Vitamina D3
Tiene su origen en fuentes animales como los huevos, el pescado graso, las huevas de pescado, el hígado de pescado y el AHB (aceite extraído del hígado del bacalao).
Ambas formas fomentan la salud, pero los estudios han señalado que el cuerpo puede absorber, descomponer y utilizar con más facilidad la vitamina D3. De ahí que las fuentes alimentarias de origen animal sean las que se recomienden para garantizar un aporte adecuado de la vitamina D.
A continuación, incluimos una lista de siete alimentos y complementos alimenticios distintos, junto con la cantidad necesaria para satisfacer la ingesta diaria de 5 microgramos.
- Leche enriquecida con vitamina D – 1250 g
- Salmón – 88 g
- Yema de huevo – 83 g
- Hongos enriquecidos – 75 g
- Hígado de bacalao – 11 g
- Aceite de hígado de bacalao Möller’s – 5 g
Estudios recientes señalan que los hongos comestibles se pueden enriquecer con vitamina D2, mediante luz ultravioleta artificial, mientras los hongos aún están creciendo, y también después de cosecharlos. Quince minutos a la luz directa del sol bastan para producir de 5 a 20 microgramos de vitamina D2 en 85 gramos de hongos, independientemente del tipo o de la temporada.
Las fuentes más habituales de esta vitamina son el pescado graso y el hígado graso, que contienen alto contenido de vitamina D en forma de D3, además de grasas y ácidos grasos Omega-3 EPA y DHA. Aquí podrás encontrar algunas de nuestras recetas más aplaudidas, ¡que aproveche!
El sol
Probablemente sepas que el sol es una fuente de vitamina D pero, de hecho, es tu cuerpo el que produce vitamina D en forma de D3 cuando tu piel queda expuesta a la luz del sol. Este es el motivo por el que la vitamina D no es, técnicamente hablando, una vitamina, ya que las vitaminas se definen como nutrientes que el cuerpo no puede producir por sí mismo. Sin embargo, esta producción depende de una luz solar adecuada en las grandes áreas de la piel durante. Una exposición de hasta 20 minutos al día y en función del tono de tu piel debería ser suficiente. ¿Sabías que cuánto más oscura sea tu piel, más tiempo tendrás que exponerte a la luz directa del sol para producir suficiente vitamina D en el cuerpo?